
El pasado 21 de Febrero de 2015, coincidiendo con la festividad de las Bodas de Isabel de Segura y por segundo año consecutivo, l’Associació Ferroviària de Godella organizó una visita en tren a Teruel.
A la visita asistieron 31 personas entre socios, simpatizantes y vecinos de l’Horta, partiendo de la estación de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana de Godella en el tren de las 8:32, formamos un grupo para después acudir a l’Estació del Nord de Valencia, donde se había quedado a las 08:50 para iniciar el viaje.
A las 09:30 arrancó puntual nuestro tren de Renfe Operadora, un automotor de la Serie 599 , moderno, dotado de una velocidad punta de 160km/h, máquinas de autoventa y más comodidades que los camellos Serie 592 que aseguraban esta relación hace unos años.
Tras unos minutos de tren circulando paralelos a la costa, el tren entra en Sagunt, donde invierte el sentido de la marcha y comienza una lenta y complicado ascenso, que los 599 encaran como ningún tren hacia Teruel y Zaragoza, destino final del tren.

Una vez superadas las primeras pendientes se llega a la estación de Segorbe-Ciudad, donde se realiza una breve parada para recoger viajeros y de paso, recuperar tiempo que llevábamos perdido, pues en Sagunt salimos con retraso debido a la espera de un viajero que venía con el tren de Tortosa – una UT 470 que venía con mucho retraso debido a un problema técnico – , después de Segorbe el tren comienza el ascenso al Ragudo, pero en su versión ferroviaria, con una serie de túneles y muchas curvas hasta llegar a la estación de Barracas, donde tuvo también su minuto de parada comercial.
Siguiendo con las paradas del tren, llegamos ya a Mora de Rubielos-Albentosa, donde el tren ascendente tiene que esperar al descendente Zaragoza-Miraflores -> València-Estació del Nord, que en este caso también iba algo retrasado debido principalmente a las limitaciones de velocidad que tiene la línea más arriba. Una vez librado el tren descendente la vía principal, nuestro tren sigue hacia arriba, subiendo uno de los tramos más complicados de la línea, el Puerto del Escandón y la subida hacia Teruel, no sin antes realizar otra brevísima parada en Sarrión y finalmente llegamos a Teruel.

Tras descender del tren en Teruel y realizar una foto de grupo, los asistentes se dividieron en grupos, en los que cada uno fue por libre, visitando Teruel, el mercadillo medieval, Mausoleo de los Amantes o toda la fiesta que es la ciudad.


Durante los tres días que dura la representación de las Bodas de Isabel de segura, la ciudad de Teruel se transforma en un pueblo medieval, donde no faltan las danzas medievales, personas vestidas con trajes de época, exhibiciones medievales, corridas de toros y frío, mucho frío.
En nuestra visita a Teruel este año, el tiempo no acompañaba, estando este muy revuelto y pasando mucho frío, lloviendo o nevando a ratos y con claros de sol a otros ratos. El pasado año 2014, que la asociación hizo su primera visita a Teruel, el día salió excelente, con sol radiante y temperaturas agradables para visitar toda la fiesta, no obstante por esa época del año, hace frío, mucho frío hay que recordar que Teruel está situada a 915m de altitud respecto al nivel del mar en Alicante, lo cual hace que cualquier lluvia, se convierta en aguanieve o nieve y más cuando el cierzo sopla.
A pesar de las condiciones adversas y todo lo llena que está la ciudad, los visitantes pudieron y tuvieron tiempo de visitar todo lo que desearon así como disfrutaron de la gastronomía de la zona con platos basados en el cerdo o guisos típicos y vino tinto de la tierra para entrar en calor.




A la tarde, hora y media antes de coger nuestro tren de vuelta y aprovechando que nuestros compañeros de la Asociación Turolense de Amigos del Ferrocarril están junto a la estación y gracias a su amabilidad y atención, por dedicarnos un rato en un día festivo en su ciudad, pudimos visitar el local que dicha asociación tiene en un edificio anexo a la estación de Teruel.


En este local, ATAF dispone de una extensa colección de patrimonio ferroviario tales como relojes de estación totalmente restaurados, centralitas telefónicas de época, máquinas expendedoras de billetes de los años 70-80 y muchos elementos interesantes con los que contaban los factores de circulación o jefes de estación antes de la entrada en servicio de la tecnología actual de las pantallas modernas, la telefonía IP y los displays de atención al viajero…




En ATAF también disponen de una sala de maquetas de escalas HO y N modulares, con varios trenes sobre las vías y en el caso de la maqueta de escala HO, con un circuito de trazado muy sencillo, especialmente diseñado para introducir a los más pequeños en el mundo del modelismo ferroviario, destacando especialmente una reproducción de una estación semisubterránea que oculta las vías curvas en las que el tren da la vuelta, así como un cargadero con muelle para carga de trenes de automóviles.



En el exterior de la estación, junto a los andenes y con nuestros compañeros de ATAF pudimos visitar todo el muelle de mercancías, las tolvas transporte de arena de Renfe que, tras la suspensión de los tráficos, han quedado apartadas en la estación de Teruel, Puerto de Escandón, Barracas y otras estaciones de las líneas y también pudimos ver las señales mecánicas cuidadosamente restauradas.
Por último, mientras esperábamos nuestro tren de vuelta y al calor del vestíbulo de la estación de Teruel en la sala de viajeros y con la calefacción a tope, pues apenas había 4ºC en el ambiente, comentamos con nuestros compañeros de ATAF el estado de la línea y los tráficos que se habían eliminado de ella así como el tren de transporte de automóviles que se había creado recientemente, coincidiendo en que la línea debería potenciarse, renovando totalmente muchas de las estaciones del tramo entre Zaragoza y Teruel, arreglando ciertos tramos que están limitados a baja velocidad y carga por eje, así como en la necesidad de instalar el sistema Tren-Tierra y enclavamientos electrónicos en toda la línea para que por lo menos, los trenes de mercancías puedan circular durante el día y la noche y lo hagan sin el inconveniente de tener que ir acompañados por un segundo maquinista, todo ello unido a inversiones urgentes que necesita la línea para hacerla mejor y adaptarla a los trenes TECO y de mercancías que podrían circular por ella, pues acortarían distancia entre Zaragoza y Valencia al evitar dar un rodeo por Madrid o Tarragona, haciendo que los trenes sean más baratos de operar y aprovechando la capacidad de meter trenes que tiene esta línea, casi sin tráfico durante gran parte del día.


Después a las 19:39 llegó nuestro tren de vuelta a València, al que abordamos con muchas ganas de calor, calefacción y finalmente un poco de descanso, poco más de 2 horas y 35 minutos después abandonamos este tren en la valenciana Estació del Nord, finalizando aquí nuestra visita a Teruel por segundo año consecutivo.

Desde estas líneas, agradecer a todos los socios y viajeros que vinieron con nosotros – que esperamos verlos en próximas actividades – y en especial, un agradecimiento a ATAF Teruel, que por segundo año nos ha abierto sus puertas y acogido en sus instalaciones pese al frío y el día festivo.